sábado, 28 de noviembre de 2009

Fino matrimonio del palacio gay

El nuevo escándalo de la jefatura de gobierno sumerge al elegido del bigote bueno en un mar de dudas. Después de permitir que el zurdaje judío le sacara al policía más recomendado por la embajada de Estados Unidos, le da legitimidad al llamado matrimonio gay.
Por más indignado que esté Bergoglio, es la obligación de este foro de libertad periodística denunciar que había bastantes indicios de las tendencias "modernas" del bigote bueno. EL FILTRO DE SILENCIO se permite señalar las pruebas que indicaban que a Mauri le gustaba relojear a los contranatura con amor:
1) empezó con un cabaret, en el que había 22 hombres y ninguna flor.
2) eligió avanzar en política durmiendo entre el 70 % de hombres que compone el poder legislativo (¿nadie se acuerda de que fue diputado? presentó proyectos importantisimos como.... bueno, unos cuantos y muy importantes, cuando estaba despierto).
3) defendió a un amante del garrote como el Fino Palacios a capa y espada, hasta que se lo sacaron entre sus berrinches.
4) se la pasa escuchando a sus vecinos mientras se acomoda los ruleros y se peina el tegobi.
5) su más conocida performance (según dicen algunos kirchneristas, lo que mejor hace) es cantando como un reconocido lame micrófonos.

Desde este foro de libertad, le acercamos a los amigos del Opus Dei y a la Asociación Cristiana de Padres de Familias sin Putitos, que le acercan los niños envueltos para que coman los pobres curas, estas evidencias y nos solidarizamos con su lucha por impedir que cualquiera haga de su pito un culo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario